Antojo

Vengo de visitar un post de ya-saben-quién y me dió antojo de unos tacos de gusano de maguey con salsita de chimicuil (o jumiles, como mejor les acomode) pero no tan picosa para que no opaque el saborcito agarroso rico de los gusanos.

Así como los boquerones, igual los chapulines doraditos con harto limón, salsita Valentina y unas gotas de salsa de soya; también se me antojaron.

Y rematar en la terraza dando entrada a una buena sobremesa acompañados de un calientito cafe de olla inmersos en el humo envolvente con olor -y sabor- a vainilla de un buen puro artesanal traído directamente de Los Tuxtlas.

¿Quién se apunta?

¿O prefieren que las ideas y pensamientos vayan fluyendo mientras intentamos arreglar el mundo con la aritmética del dominó bajo los acordes de algún corrido norteño, acompañados de un soberanísimo emparedado de carne tártara en maridaje de un "refresco de cebada" para que no se nos atraganten las palabras cuando sean fervorosamente expresadas en alguna cantina del Centro Histórico de la Cd. de México?