domingo, octubre 30, 2011

La Gran Calabaza

Estas fechas otoñales con sus fríos incipientes siempre me remiten a las fechas decembrinas que ansiosamente espero porque ya estan casi tocando la puerta y sobre todo cuando era niño pues esperaba a Santa Claus y los regalos, pero también al 6 de enero con los Reyes Magos y más regalos.

Yo siempre esperaba la navidad particularmente por esa magia infantil que se genera alrededor de ese personaje barrigón de traje rojo y risa cavernosa digna de cualquier engendro. Después el colofón de regalos llega cuando al comenzar el año hacen su arribo los Reyes Magos.

Asi concluían las fiestas, los niños quedaban contentos y los chantajes familiares comenzaban: "portate bien este año para que te vaya mejor la siguiente navidad" o "ni se te ocurra porque si no Santa Claus y los Reyes no te van a traer nada".


Pero en mi casa yo también le hacía carta a La Gran Calabaza.

Es otro ente similiar a los anteriores con la característica de que se presenta en Halloween y Día de Muertos. Siempre hice mi carta y la guardaba en sitios estratégicos, lo malo es que como la mayoría de la gente mis padres tampoco conocían a La Gran Calabaza por lo que mi carta nunca era recogida y mis ilusiones se esfumaban con el pensamiento de que "no me porte bien y por eso no me trajo nada".

Año tras año y más de una década de esperarla pero nunca llegó; pero tampoco nunca le pregunte a mis papás las posibles razones porque sabía de antemano que su respuesta podría ser: "porque te portaste mal".

Jamás imagine que ellos no la conocían.

Ahora sé por que nunca llegó. La carta no debía ser igual a la de Santa Claus o la de los Reyes Magos, esta debía ser especial, porque solo a niños escogidos les lleva regalos. La Gran Calabaza por ser un ser bueno, pero de la oscuridad, no solo lleva regalos a los niños que se portan bien, sino a aquellos que, además, son especiales en su forma de pedirlo.

Es por ello que la carta debe ser quemada de las orillas para que quede como un pergamino y realizada en una muy especial comunión de convivencia entre padres e hijos para que así la magia de La Gran Calabaza los detecte y se acerque a esos escogidos, recoja la carta y en la noche de Halloween o Muertos deje sus regalos.

Así lo hago ahora yo con mi hija, porque yo soy un papá que SI conoce a La Gran Calabaza y aún hoy trato de escuchar el crepitar de sus ramas en su interminable vuelo nocturno en la noche de Halloween y del Día de Muertos. ¿Como es que hasta Charlie Brown con todo y Snoopy conozcan a La Gran Calabaza y ustedes no?


2 comentarios:

la MaLquEridA dijo...

Porque no nos dijiste. No conocía a la Gran Calabaza y ni que había que escribirle cartas.

Así como tu tienes a tu hija, yo tengo a Natalia y le arraigaré esa costumbre. Ya sé como se hace el terminado de pergamino, lo he hecho antes, lo que queda es esperar el próximo año.

Saludos Licenciado, tu hija estará encantada de escribir esa carta.

Un abrazo.

Xavysaurio dijo...

Yo sí, pero por los Simpsons jijiji