Adiós contagioso 2022. Bienvenido 2023

 Por fin llegó el final de este año 2022.

 

 La pandemia aun no habia terminado y me contagié de COVID19 en junio.

Nos cuidamos mucho, no nos quitabamos los cubrebocas que además procuré que fueran los famosos 3M, no asistíamos a eventos masivos, ni lugares muy concurridos.  Ibamos al gimnasio en horas muertas... pero parece que ahí fue.

 

Un día al ir al gym con mi hija sentí sofocos al hacer los ejercicios habituales, al regresar tuve que sentarme a medio camino y ayudado por mi hija terminamos el camino con andar muy lento porque no me alcanzaba la respiración para mas, pero no sentía nada mas de lo que hasta ese momento estabamos empapados por las noticias que a diestra y siniestras nos  decían los sintomas desde hace 2 años. Si, ok, el sofoco era uno de ellos, pero venian en conjunto, no aislado por lo que decidimos ir al cardiólogo quien me hizo examenes de esfuerzo y resistencia y no detectó nada y para mi mala suerte no tuve sofocos en ese momento.Me dejó un aparato llamado Monitor Holter todo conectado y cableado a mi cuerpo por 3 días, en los que tampoco tuve sofoco alguno. El día que fui a entregarlo con mi hija, de regreso nos fuimos a comer tacos, anduvimos en el parque, nos compramosunos helados y todo estaba normal, por la noche el cardiologo me dijo que no habia nada y tenia que estar pendiente de que ocurriera un nuevo evento e ir inmediatamente a urgencias.

ya con ese diagnóstico dormí tranquilo esa noche, pero al día siguiente regresó el sofoco y no llegó solo, dolor de cabeza, moquera y un cansansio brutal llegaron tambien. Dos dias despues fui a hacerme la prueba acompañado porque no podia respirar bien y menos caminar y finalmente supimos la verdadera razon, estaba sufriendo de COVID19. Me habia contagiado en la subida de la 5a ola.

 

 

Me aislé  en la recamara, mi esposa y mi hija me dejaban comida en la puerta y el baño que compartimos los 3 estaba siempre ventilado.  Así comenzó mi calvario.

Mi hija empezó con sintomas a los 4 días, yo la contagié. Maldita sea la suerte, yo la contagié!!!

Al haber 2 contagiados en casa, mi esposa decidió salir de casa y quedarse refugiada en otro sitio. Estabamos mi hija y yo solos y aislados uno del otro.

ella no la pasó tan mal, solo tuvo fiebre un dia y sintomas de gripe fuerte con ronquera como su peor sintoma y se le pasó mas rapido que a mi.

 

 Me sentía tan mal que llegué a pensar que yo si me iba a morir. Las noches 5 y 6 fueron las peores, llegué a tener 41 grados de termperatura y no podia respirar bien, el aire no me alcanzaba y eso estaba en reposo absoluto!! Ir al baño a solo 4 metros de distancia eran una jornada maratónica que tenia que hacer hasta con 3 paradas. Apenas podia respirar un poco mejor estando completamente vertical, ya sea sentado o parado. Cuando daba las bocanadas mas grandes buscando que el aire valioso inundara mis pulmones, mi oxigenación escasamente subia a 90% y no pasaba de eso. acostado llegué a a monitorear 83%. Sentado tenía un promedio de 88%.

Cuando llamé al hospital me dijeron que tenía que bajar de 80 para poder ser admitido y que estaba en situacion estable por lo que resignado y con mucho miedo tuve que quedarme en casa.

La tos, la fiebre y el cansancio se convirtieron en mi unica compañia

La soledad en una situacion de miedo y angustia como esa, provoca una psicología muy compleja que me llevó a tener pensamientos catastróficos. No queria asustar a mi hija diciéndole lo mal que estaba, mi esposa no podria hacer nada sin el riesgo de contagio y solo pensaba en la mortificación traumatica que podría causarle a mi hija si llegara a morirme en la  noche y ella encontrarme en esa situación por la mañana.

Por la mañana del 7mo día comencé a sentir una muy ligera mejoria, al menos ya no me dolia la cabeza y la fiebre habia cedido de los 40-41 que tuve las 2 noches anteriores, por fin llego a 38. Para el 8vo día por fin empecé a notar una mejoria, la oxigenacion ya se mantenía en 91%, y respirando profundamente alcanzaba 95% aunque acostado seguia bajando a 88%. Tenia que seguir durmiendo sentado y soportar la perniciosa tos. Ya podia ir al baño sin sofocarme.

A los 12 días mi hija ya estaba como si nada hubiera pasado y yo mucho mejor.

 

Pude volver a dormir acostado hasta 3 meses despues y la tos me duró poco mas de 4 meses.

En el 2021 recibí 2 dosis de la vacuna Pfizer. Luego en febrero la vacuna rusa Sputnik. me queda claro que de no haberme vacunado, seguramente si hubiera muerto.

Sobreviví al COVID19

El 29 de diciembre me aplique la vacuna cubana Abdalá y me pegó durísimo, me dio calentura, escalofrios y una especie de reumatismo agudo que me duró poco casi 36 hrs. No podía moverme y estuve tumbado en cama a ver a que horas se me bajaban los efectos secundarios. No podía comer porque me dolia hasta la mandíbula!!

No recuerdo muchas otras cosas de este año, quiza el resto fue muy random o los eventos no alcanzaron las trascendencia que tuvo mi contagio

Aqui les dejo las fotos del ultimo atardecer del 2022 para sumarse a la costumbre de este  blog.

 

BIENVENIDO 2023